Cursar un Executive MBA, un reto pero una recompensa
Una de las fuerzas motrices para obtener mi MBA en Emory fue afinar y mejorar mi perspicacia empresarial mejorando mis capacidades analíticas y matemáticas.
Una de las fuerzas motrices para obtener mi MBA en Emory fue afinar y mejorar mi perspicacia empresarial mejorando mis capacidades analíticas y matemáticas.
Como la mayoría de los profesionales, empiezo casi todos los días con una taza de café caliente. Cuando cojo una taza de café en la sala de descanso de la oficina, compro café en grano o pido una taza de café preparado, suelo concentrarme en mi próxima experiencia cafetera.
He tenido la suerte de tener muchas oportunidades de aprender, practicar y reflexionar sobre las actividades de búsqueda de empleo durante mi estancia en el Programa de MBA Vespertino de Goizueta.
Hace poco leí en el Center for Creative Leadership que alrededor del 60 por ciento de los directivos noveles no reciben formación formal. Yo no fui una excepción a esta norma.
Enhorabuena por dar el primer paso hacia tu MBA. Ya sé que dicen que el primer paso es el más difícil, pero con un poco de planificación puede ser más fácil de lo previsto.
Durante las vacaciones de invierno, participé en un coloquio internacional patrocinado por Social Enterprise @ Goizueta. El profesor Peter Roberts guió a 20 estudiantes del Evening MBA por Guatemala y El Salvador para conocer el espíritu empresarial social y los cafés especiales de estos países.
Parte del éxito de un líder consiste en aprender qué estilos de liderazgo son eficaces en su entorno y aplicarlos. Experimentar con estilos nuevos y diferentes es clave, pero esto puede ser un asunto delicado en el lugar de trabajo.
Si te dijera que este otoño he estudiado gestión de organizaciones sin ánimo de lucro, podrías pensar: “Qué bien, una clase sobre filantropía. Bien por ti”.